lunes, 13 de febrero de 2012

Un paso más

Paso a paso el cuerpo comienza a rebelarse. Imposible abstraerse a todo lo que en su interior está ocurriendo, la cabeza ha iniciado su particular batalla contra todo y contra todos.
Es su manera de luchar, de frenar el avance de ese bichito que se ha instalado dentro y que lo único que hace es pudrir nuestra existencia.
Mi padre se deteriora a pasos agigantados. Cada día es un retroceso en su carrera contra el cáncer. Pero él es valiente y asume cada ingreso como el que tiene que ir a la compra sin más remedio, todos los días.
Somos los que estamos alrededor los que sentimos esos nuevos agijonazos como algo propio, como si el empeño que hemos puesto para luchar se fuese reduciendo según sea el bache.
Un nuevo ingreso, una nueva recaída... pero él lo va a sumiendo sin protestar. Difícil en un hombre de carácter, inquieto... difícil porque es mi padre.